¿QUIÉNES SOMOS?
"Tenemos una convicción: todxs tenemos derecho a la experiencia teatral."
Somos un grupo de payasxs profesionales con diversos recorridos y ocupaciones. Tenemos amplia formación en teatro que complementamos con participaciones en capacitaciones en circo, expresión corporal, música, ilustración. Nuestras biografías académicas transitan la psicología, la docencia, el trabajo social.
Nos unen las mismas ideas y el deseo de llevar nuestro arte a espacios donde la soledad muchas veces acompaña a las personas que permanecen en los hospitales o que necesitan atenderse en ellos. Buscamos cambiar por un rato esa realidad por fantasía.
Desde nuestros posicionamientos artísticos y políticos, acompañamos los reclamos de los colectivos que luchan por sus derechos.
Claudia David (Krota)
Siempre fui una soñadora que me curé de los golpes de la infancia con el juego y la risa. Amé a los payasos desde que los conocí: mañanas con Pepe Biondi, mediodías con los 3 chiflados. Tardes de súper acción, risas y fantasías con el Gordo y el Flaco, Abbot y Costello y Jerry Lewis. Los domingos con Gaby, Fofó y Miliki y Pepitito Marrone (¡cuánta tele que miraba!). Así transcurrió mi infancia y parte de la adolescencia. En mi juventud me recibí de maestra, profesión que nunca dejé y que me mantiene al día con la vida. Cuando fui lo suficientemente grande empecé a descubrir que el clown sería el arte que me permitiría tratar de comprenderme. Aprendí con varios maestros (Marcelo Katz, Lila Monti, Gabriel Chamé) y son muchxs con lxs que quiero continuar. Formé parte de varias varietés y espectáculos de clown, participé en dos obras de teatro: «Desterradas» y «SuVersión Payasa». Ahora con Estado Payaso sigo soñando, jugando, riendo reponiéndome y ayudando a otros a reponerse de los golpes del mundo.
Luciana Wiederhold (Carlota)
Cuando era una niña todo me daba mucha vergüenza, generalmente estaba callada. Así que mi familia decidió mandarme a hacer muchas actividades artísticas para desinhibirme un poco: expresión corporal, artes plásticas, música, pero nunca teatro. En el sur del país comencé el colegio secundario. Allí ofrecían actividades extra escolares y elegí teatro. Así comenzó mi camino sin fin… Llegué a Buenos Aires a los 14 años y empecé a estudiar con Silvia Kanter, Nora Mercado, Mónica Fainzaig y Alicia Bruzzo. Cómo lo que más me gustaba era hacer escenas cómicas busqué el clown sin saber mucho de qué trataba, pero intuyendo que ese iba a ser mi lugar. Así es que desde mis 20 años me gusta entrenar clown y lo hice con Marcelo Katz, Pablo Algañaraz, Raquel Sokolowicz, Gabriel Chamé Buendía, Sue Morrison, Totó Castiñeira y con Antón Valen. También decidí ponerme más académica y estudié y me recibí en la Universidad Nacional de Arte (UNA) la carrera de Profesorado de teatro. Participé y organicé el ciclo «Clown Imprevisto» y también participé en «Clowns No Perecederos». Participé como payasa en «Elemental», «Ilusos» y «Aires» de Marcelo Katz. Realicé un unipersonal llamado «Un Poquito Sola» y una obra que se llamó «Desterradas». Un día me invitaron a participar de una prueba piloto en el Hospital Garrahan, dando comienzo con esto la ONG Alegría Intensiva, con la cual también hicimos un espectáculo llamado Una historia para no dormir dirigidos por Mariana Briski. Luego de 6 años de trabajo en diversos hospitales infantiles, entendimos que estábamos listos para armar nuestra propia asociación civil, y en ese camino vamos con lxs compañerxs de Estado Payaso.
Cecilia Vera (Squiaffo)
Las dedicatorias de las fotos de la escuela siempre eran para “la payasa del grado”. Haciendo honor a esa fama, decidí que quería ser una payasa hecha y derecha. Entonces, me fui a estudiar y tomé clases con distintos profesorxs: Marcelo Katz, Gabriel Chamé Buendía, Raquel Sokolowicz, Pablo Fusco y Lila Monti. Cada vez que puedo, vuelvo “al aula de lxs payasxs” para seguir aprendiendo. Y cada vez que lo hago, me descubro y descubro en mis compañerxs mil maneras de payasear. Además, soy maestra. Trabajo con niñxs de todas las edades con los que me divierto mucho y hace poco me recibí de Trabajadora Social. Ser payasa me permite conocer a otrxs y conocerme. Hacer amigxs con los que compartir proyectos y ganas de transformar algunas realidades aunque sea por un rato. Estado Payaso es el espacio que elijo para eso.
Gabriel Cohan (Ritten)
De chico me llevaron a ver el Circo de Moscú. Al final del show llenaron la pista de humo y luces de bengalas. Me asusté tanto que no quise saber más nada ni con el circo ni con los payasos. Muchos años después una amiga me invitó a iniciar un taller de clown. Como varias cosas en la vida fui en contra de los miedos y los prejuicios. Nunca más dejé de ser payaso. Ya pasaron 20 años donde me formé con varixs maestrxs. Principalmente con Marcelo Katz y luego seguí creciendo junto a Raquel Sokolowicz, Guillermo Angelelli, Gabriel Chamé. También exploré el mundo de las máscaras y el teatro físico con Nico Kohen y George Lewis. Mientras tanto… me recibía en la UBA e iniciaba también mi camino como psicólogo. Después de presentar varias obras y ciclos de teatro y clown como: «Elemental», «Clown Imprevisto», «Aguas», «Esperando a que pique», «Una historia para no dormir», «Se vuelve Giros» entre otras, con las cuales actué en teatros de Buenos Aires, el interior del país y el exterior, me encontré en mi camino con el mundo del clown en los hospitales. Así fue que participé en los inicios de la organización Alegría Intensiva. Hace un tiempo, con un grupo de amigxs-colegas decidimos formar nuestro espacio de trabajo, Estado Payaso. Aquí estamos desarrollando la hermosa tarea de ser clowns en los hospitales y produciendo contenidos sobre nuestra actividad como grupo y en el encuentro con otrxs.
Jime Vilacoba (Doris)
Durante la adolescencia decía: ¡quiero hacer tango!, ¡quiero hacer folklore!, ¡quiero hacer teatro!, pero nunca tomé clases. Al terminar el secundario me anote en la UNQUi para hacer la carrera de Biotecnologia. Mis padres me sorprendieron anotándome en un taller de Teatro (que luego se transformaría en Tecnicatura en actuación). Por las mañanas biología, química, análisis matemático e informática. Por las noches teatro argentino, expresión corporal, voz y actuación. Luego de uno o dos años, solo continuaron las noches, el maquillaje, la tragedia griega, las improvisaciones y las risas en la EMBA. Luego de unos años era Técnica en Actuación ¿y ahora qué?. Me fui a profundizar en la “técnica del arte dramático”, al estudio de Augusto Fernandes. Lloré, me enojé, me mostré, me expresaba con cierta libertad que me gustaba pero… quería probar algo más corporal, decía. Algunas compañeras me comentaron que tomaban clases de clown en la Escuela de Marcelo Katz. Vi uno de sus espectáculos y dije: ¡esto me gusta!. Fue entonces que comencé mi formación en clown. Tomé clases con Hernan Carbon, Marcelo Katz, Pablo Fusco, Marcos Arano, el Gran Chame y Juli Carreras. Participé como clown y asistente en varias obras y algunas varietes. Seguí entrenando en intensivos y un día los escenarios pasaron a ser patios de escuelas, comedores, plazas, cárceles y hospitales. Y otro día los compas de Estado Payaso me invitaron a participar en su proyecto, dándome la posibilidad de trabajar como payasa en el Hospi de Clinicas. ¡GRACIAS!
Daniela Tolini (Gulash)
Cuando estaba en 6to grado los viernes en las últimas horas de clase podíamos elegir talleres y ahí descubrí en las clases de teatro la posibilidad de jugar, inventar y divertirme. Seguí haciendo más talleres y muestras hasta que descubrí el circo y el clown de la mano del profesor Marcelo Katz mientras estudiaba como maestra de nivel inicial y descubría a la vez el mundo del maquillaje artístico. ¡Conocí muchos amigos! Luego estudié con Pablo Algañaraz, Lila Monti, Marina Barbera y Raquel Sokolowicz. Estudié comedia musical. Ingresé en el IUNA en la licenciatura de actuación y me llené de amigxs y nuevos mundos. Participé como payasa de hospital en la ONG Alegría Intensiva visitando distintos hospitales y luego me llamaron para ser parte de un hermoso grupazo de valientes amigxs llamado Estado Payaso con quienes sigo actuando, jugando y aprendiendo.